Los ciclos de transformación
Porque existen los ciclos?
Ciclos es el lenguaje de la impermanencia. Nadie escapa las confrontaciones de los ciclos de vida ya que ellos son las herramientas evolutivas de la vida. Al conocer este reloj interno, podemos suplir las herramientas necesarias para apoyar el proceso de aprendizaje y agilizar las transiciones.
Según las enseñanzas yoghis, nuestra mente procesa 1000 pensamientos conscientes o inconscientes en cada parpadeo. Nuestro sistema nervioso codifica, organiza y maneja la información biológica, emocional y mental de nuestra estructura terrenal, haciendo códigos de respuestas en nuestro comportamiento. Hacer consciente los ciclos de la vida es fundamental para la estabilidad interna y ayudar al consciente a regular la información proveniente del subconsciente. Con las propias herramientas, el sistema nervioso puede descansar durante un proceso intensivo de transformación.
Los yoguis explican los “Tres Anillos del Éxito”, como fundamentos de transformación. Esto es parte del uso de la humanología que nos permite vivir con gracia, dignidad y pureza en todo momento. Somos capaces de experimentar cambios tanto consciente como subconscientes mediante el llamado de los ciclos. Un ejemplo es cambiar conscientemente nuestra respiración para crear un cambio en nuestros estados físicos y mentales. Por otro lado, nuestras emociones influyen en nuestra respiración de manera inconsciente. Es todo un paquete, donde la respiración, los ciclos y el impacto en mente, emoción y acción pueden producir un impacto creativo o destructivo.
Sin ciclos no hay confrontaciones existenciales, no nos cuestionaríamos el renacer y la muerte. Durante transiciones el subconsciente abre las puertas para informarnos de los aspectos que debemos considerar para el cambio. Es una avalancha de información que necesita ser apoyada con prácticas de centralización, meditación y reflexión. De otra manera nos hundimos en contenidos obsoletos, en apegos, identificaciones y en críticas internas.
Tipos de ciclos evolutivos
Biologicos
Hay 2 tipos de ciclos de formación y disolución de nuestra biología: la concepción y la muerte. – O sea tomar forma y disolver la forma de una manera consciente.
Estos dos ciclos nos despojan de toda identificación personal- Ellos disuelven los apegos de la forma.
Ciclos experienciales: Son aquellos vividos durante el tiempo en la tierra. Ellos apoyan madurez y responsabilidad interna. Hacen referencia a el despego del ego y dirigirnos hacia la humildad, compasión y visión no polarizada.
Los ciclos de vida se dan con una geometría exacta y en 3 puntos principales.
1.- Ciclos de vitalidad- Hace impacto en nuestro prana, salud y vitalidad.
2.- Ciclos de inteligencia.- Hace impacto sobre nuestra facultades mentales.
3.- Ciclos de identidad.- Hace impacto en nuestra definición personal.
La geometría de los ciclos
1.- Ciclo de vitalidad- Cuanta energía tengo?
El ciclo de vitalidad está relacionado con la fuerza de vida o energía vital de los cuerpos terrenales. ( cuerpo, etérico, emocional y mental). La energía vital se dona de acuerdo a la constitución (dosha) y considera la energía que se necesita para completar una misión terrenal. Nuestra vitalidad o CHI, se acumula en las suprarrenales y cada 18 años disminuye.
Se relaciona con la salud física y la vitalidad general del cuerpo.
Durante nuestra vida, se presenta en los siguientes años.
0 18 36 54 72 90
2) Ciclo de inteligencia- Que sé y como aplico lo que sé?
Las facultades mentales, como memoria, coherencia de valores, lógica, correctas acciones en determinados roles, y armonía entre mente/cuerpo están bajo el ciclo de la inteligencia. Tiene que ver con cómo aplicamos nuestra inteligencia a nuestras acciones. Niega el aprendizaje falso y lo lleva hacia una dirección constructiva. Cambia su forma de acuerdo con sistema de creencias, roles y con lo que nos identificamos.
Este ciclo disminuye en capacidad cada 11 años.
Estas son las siguientes edades donde se presenta diferentes expresiones en este ciclo.
0 11 22 33 44 55 66 77 88 99 110
3) Ciclo de la conciencia: ¿Quién soy y que quiero?
El ciclo de conciencia dirige y abraza el equilibrio entre el ciclo de vitalidad y el de la inteligencia Estos ciclos ayudan a una persona a cultivar su madurez y son como mareas de energía que mueven el yo personal, hacia el yo impersonal.
El ciclo de conciencia es el único ciclo que debe de aumentar en vez de disminuir. El soltar definiciones de nuestro yo, de lo que pensamos que somos, tenemos y sabemos, se refina y define con la edad. Crisis de identidad reflejan nuestras inseguridades de tomar el territorio que se necesita para madurar y expandir nuestra presencia.
Los ciclos de conciencia se dan cada 7 años. Haciendo estas edades sensibles al cuestionamiento de identidad.
0 7 14 21 28 35 42 49 56 63 70 77 84 91 98
Crisis y transiciones evolutivas
En los años donde los ciclos convergen es cuando hay más presencia de aprendizaje en nuestra humanidad. Las transiciones cuando se comprenden, se pueden apoyar conscientemente, sino todo se toma de una manera personal, se aumenta la sensación de la experiencia y se revuelca el consciente con el subconsciente produciendo crisis destructivas.
Estas transiciones son picos de cambio con desafíos de desarrollo que requieren conciencia para permanecer equilibrados. La unión de los ciclos son propuestas para rendirnos a algo más sofisticado, más maduro y más expansivo. Toda nuestra vida es un ciclo, que nos invita a ser auténticos, a considerar el valor de nuestra vitalidad, a ver lo real de las cosas y llevarnos a un punto de humildad.
Miremos ahora en que edades los ciclos se convergen:
Nacimiento;
11-14;
21-22;
33-35-36;
42-44;
54-55-56;
63-66;
72-77;
Muerte
Para obtener un fluido coherente de nuestras transiciones necesitamos distinguir cual es la propuesta de desarrollo que cada ciclo nos propone. – Ser flexibles es posible por medio de la concientización, responsabilidad y meditación – introspección-.
Los pensamientos que no se concientizan se almacenan en la mente subconsciente y, finalmente, en la mente inconsciente. Durante períodos de cambio intenso, aumenta la intensidad y visibilidad de lo que no hemos integrado en nuestras vidas. Perdemos el control del momento y el resultado es una ensalada de esos pensamientos.
La meditación ayuda a mantener el subconsciente despejado y funciona para mantener el sistema libre tensión y confusión durante los ciclos de la vida.